La paradoja es vivir animados para no desanimar

"Las ideas que defiendo no son mías. Las tomé prestadas de
Sócrates, se las birlé a Chesterfield, se las robé a Jesús. Y si no os
gustan sus ideas, ¿las de quién hubierais preferido utilizar?"
DALE CARNEGIE

¿Como animar en estos tiempos?. ¿De dónde sacar las energías, la animosidad, la pasión y la creencia que podemos despertar lo mejor de las personas?

Nuestros mejores animadores y modelos de animación, son nuestros propios padres, amigos, abuelos, o personas significativas de nuestra vida, todos ellos, como dicen mis alumnos son: “Humildes, pacientes, trabajadores, optimistas, sociables, valientes, colaboradores, cariñosos, alegres, con espíritu de superación, entrega, apoyadores, generosos, solidarios, con espíritu de sacrificio, sociables".

Animémosonos a leer:
La paradoja. Hunter, James C. Barcelona Urano, Empresa Activa 1999. Texto en pdf